curso de verano
del 5 al 11 de agosto
Una semana para descansar, renovarse, profundizar en el conocimiento de uno mismo y disfrutar de un entorno privilegiado
La meditación no es una práctica únicamente para monjes, renunciantes y ascetas sino para todas las personas que quieran profundizar en el conocimiento de la realidad y de sí mismos. Sean quienes sean, lleven la vida que lleven y tengan el coeficiente intelectual y el currículum que tengan.
El camino que nos sugiere la práctica meditativa es tomar conciencia de todos los aspectos que conforman nuestro ser, pues es así como encontramos el sentido, la claridad y la libertad a nuestra experiencia humana.
En el Curso de Verano nos dedicamos durante una semana a reconocer estos aspectos (corporales, sensoriales, emocionales, mentales e impersonales). De esta manera, podremos comprobar por nosotros mismos, si existe algún tipo de relación entre la meditación y el equilibrio, la tranquilidad, la liberación y la apertura.
El camino que nos sugiere la práctica meditativa es tomar conciencia de todos los aspectos que conforman nuestro ser, pues es así como encontramos el sentido, la claridad y la libertad a nuestra experiencia humana.
En el Curso de Verano nos dedicamos durante una semana a reconocer estos aspectos (corporales, sensoriales, emocionales, mentales e impersonales). De esta manera, podremos comprobar por nosotros mismos, si existe algún tipo de relación entre la meditación y el equilibrio, la tranquilidad, la liberación y la apertura.
"No nos sentamos en meditación para convertirnos en buenos meditadores, sino para estar más despiertos en nuestra vida cotidiana".